En la actualidad, la transformación digital se ha convertido en un eje estratégico fundamental para la evolución del tejido empresarial. En un entorno marcado por la acelerada innovación tecnológica y la creciente exigencia del mercado, las empresas se enfrentan al desafío de reinventar sus procesos, productos y modelos de negocio para seguir siendo competitivas. Este proceso va más allá de la simple digitalización: implica una integración profunda de tecnologías emergentes que permiten optimizar operaciones, tomar decisiones basadas en datos en tiempo real y ofrecer experiencias más personalizadas y eficientes.

En este contexto, las empresas asturianas están dando pasos firmes hacia la Industria 4.0 mediante la adopción de herramientas como el Internet de las Cosas (IoT), la computación en la nube (cloud computing), la inteligencia artificial (IA) y los gemelos digitales. Estas tecnologías no solo impulsan mejoras operativas y eficiencia, sino que también abren nuevas oportunidades de negocio y colaboración. La transformación digital en Asturias refleja una apuesta decidida por la innovación como palanca de desarrollo económico y competitividad en un escenario industrial cada vez más conectado y automatizado.